Con unos peques. Soy el segundo por la izquierda.

viernes, 29 de febrero de 2008

Los partidos y los asesores

De alguna manera nos somos pocos los que últimamente hemos visto con un cierto grado de sana envidia lo que ocurre en Estados Unidos y las primarias: elegir dentro del mismo partido a aquellos candidatos que luego se enfrentaran por la presidencia. Algo así como si se nos diera la oportunidad de elegir primero si queremos a Fernández de la Vega o José Blanco o que en el PP tuvieran que luchar primero entre Gallardón, Rajoy y Esperanza Aguirre. Si fuera así, les puedo asegurar que nos llevaríamos más de una sorpresa y seguramente los partidos tendrían que afinar más en sus presupuestos políticos, así como los candidatos no podrían poner cara de ganador a priori. Claro que usted me dirá que entonces tendríamos una democracia que se basa más en los individuos particulares y su manipulable imagen que en los contenidos de carácter puramente político. Y, en este sentido, yo le daría la razón, pero también le recuerdo que los asesores también funcionan aquí y muchas veces con grandes meteduras de pata. Y si no mire la coda con la que terminó Rajoy el debate del otro día, contando una lastimera historia de una niña, que es para cesar al asesor que se lo sugirió, no sólo porque es un recurso fácil y viejo, sino porque es una cutrada, una manipulación y una impostura, pero que, sin embargo, está en el catálogo de recursos de los asesores de los candidatos.
Pero la sana envidia que podemos tener por las primarias de Estados Unidos termina exactamente ahí. Pues yo prefiero lo de aquí por otras razones, entre otras cosas porque en los debates como los que vivimos el otro día los candidatos pueden retratarse sin pudor, nos pueden mostrar sus caras si maquillar haciendo cierto el aserto de que la cara es el espejo del alma. Y, así, a mí Zapatero me gusto más no porque me simpatice, o puede que sí (lo que no importa ahora), sino porque Rajoy lo hizo mal, estaba claramente mal asesorado y no mostró esa otra faceta suya de hombre sereno y racional; es verdad que el presidente tensionó el debate hasta donde pudo, incluso manipulando los gráficos que mostraba (que ya puestos, los candidatos se lo podían haber preparado estilo power-point), sino porque el aspirante crispó la realidad hasta el delirio y, claro, como ocurre cuando se discute tan “acaloradamente” se dicen cosas que luego uno se arrepiente de haber dicho. Como ocurrió al citar a los artistas e intelectuales como unos “rojillos” que quieren vivir de la sopa boba.
Y aquí es donde quería llegar, lo que a mí más me gustaba de las primarias de Estados Unidos era el video de compromiso y acercamiento que una serie de artistas e intelectuales habían hecho a favor de Obama, el “yes, we can” (aquí he puesto una versión con los subtítulos en castellano), pero ahora nosotros tenemos también a los nuestros apoyando a Zapatero, con una “defensa de la alegría”, poema de Benedetti que no tiene desperdicio. Y esto sí cabrea a la gente del PP, por muchas razones (en última instancia es publicidad gratis para el PSOE), pero particularmente por dos: la primera porque tienen un efecto simpatía, que acerca a muchos jóvenes, y no tan jóvenes, a posiciones políticas que si no fuera por gestos así no serían tan obvias. Y, segundo, y esta es la principal, porque pone al PP contra las cuerdas, mostrándolos como un partido que vive de posiciones un tanto pasadas y rancias, donde todo lo que suene a pensamiento les incomoda y, consiguientemente, dejando claro que en su seno vive aún la extrema derecha y que un partido que quiere verse actual, moderno y como fuerza de cambio no puede permitirse.

Las promesas a los peques

En efecto, ¿cuál sería el mensaje a los peques si ellos pudieran votar? En realidad no lo sabemos, pues ellos no votan en ninguna de las democracias que conocemos. Pero allí donde se han realizado algunos experimentos al respecto, como por ejemplo en el Estado de Puebla, México, los mensajes han sido de tipo seudo-adulto: más educación, sanidad, derechos fundamentales... Lo que sin duda está bien, en la medida que incorpora a los sujetos-niño a una seria de preocupaciones sociales de carácter general. Pero esto es sólo un experimento y sigue mirando a los peques como niños. Seguramente, para una buena parte de los políticos si los peques  votaran las promesas serían también del orden de la adulación, regalar más video-consolas, por ejemplo, y las campañas se parecerían bastante a la estructura narrativa y visual de los teletuvis. Pero no sabemos y todo esto es pura especulación. Una cosa es obvia, forzaría a los políticos, a tomar decisiones en una dirección u otro: o seguir tratando a los peques como una coartada de su visión maniquea e incluidos en el discurso del control y la disciplina social o, por el contrario, a romper con esos discursos y crear un individuo nuevo, sin elementos de sujeto discursivo.
Pero antes de esto hay que plantear otras cosas, como es la cuestión de que el que vota también puede ser parte de los elegidos, ¿se convertía, así, el hemiciclo de los diputados en una escuela de manera integral?, ¿estarían los peques preparados para entender los retorcidos planteamientos en que se mueven las propuestas legislativas de los políticos?... Pero aquí no planteo la cuestión en la medida de que se trate de verdad o no (y que tiene que ver con las construcciones políticas al uso e interés), sino de ponernos en una situación de frontera donde la realidad parece más extrema, diversa y forzada, consiguientemente, un lugar propicio para la deconstrucción, más interesante y evocador.

jueves, 28 de febrero de 2008

Rajoy y una niña

El país está de conmoción porque a Rajoy no se le ocurrió otra cosa, obviamente porque le aconsejan fatal, que cerrar el primer debate con Zapatero con una historieta de una niña, y avisamos  que esto es exactamente las cosas con las que hay que luchar sin cuartel, y no sólo, que también, porque sea una colección de tópicos desagradables (será porque la niña a la que se refiere con toda seguridad no nacerá de una familia de emigrantes musulmanes y de mayor no querrá ser lesbiana o cambiarse de sexo o porque no deseará estudiar filosofía), sino porque está utilizando la imagen de un peque para dar provocar una reacción de tipo político en una única dirección. En última instancia, se podría decir que si la cara es el espejo del alma, por igual, el discurso que se tenga sobre los peques es el espejo de la voluntad política. Y en este caso Rajoy se ha retratado a base de bien. Claro que otro hubiera sido el mensaje si los peques pudieran votar y donde estos estereotipos no podrían utilizarse tan alegremente.



Por cierto, esta es una de las mejores versiones del cuentito de Rajoy que he encontrado, porque se ríe de algo que por parecer serio es sólo una impostura más de la extrema derecha que es la verdadera cara del Partido Popular.

miércoles, 20 de febrero de 2008

Pederastas y listas

Hoy la Guardia Civil ha colgado las fotos de tres pederastas que, dicen, no localizar. Son tres fotos de  gente tan ajena que al final no dicen nada, en última instancia pueden ser cualquiera. En última instancia porque cualquiera puede ser un pederasta y por lo que parece estos son más normales en su vida en sociedad, así como su elevado número, de lo que el sentido común aconseja. Independientemente de lo que significa, por un lado, la pederastia: la medicalización de una actitud social que es parte de los discursos que tienen que soportar sobre si los peques, y, por otro, lo que ha hecho hoy la Guardia Civil, sin duda un quiero y no puedo, una cosa más para salir en los medios que cualquier otra cosa, porque aquí nadie discute que se lo toman en serio y que investigan, detienen y cortan las alas de los pederastas, de lo que hablamos es que colgar estas cuatro fotos no es nada más que propaganda política.
En este sentido lo que hay que hacer es abrir un debate serio sobre si es necesario hacer público quién es quién en el mundo de la violencia contra los peques (y, por supuesto, contra las mujeres). No es un tema fácil y no somos pocos los que no tenemos una idea clara, lo que si parece evidente es que cada día que pasa hay más gente acumulando fotos, vidéos y souvenirs (traídos de Tailandia, Brasil...) de menores en todas las formas habidas y por haber. En ultima instancia, por lo que habría que empezar reconociendo los muchos discursos que sobre los peques existen y que en muchos casos los convierten en el eje de la sexualidad adulta , en tanto que son objeto de deseo, en cuando que como idea social les remarca como el centro de una atención permanente como sujetos de la vida adulta.
Una última cosa, la  iglesia católica esta llena de estos pederastas, que en muchos casos están encubiertos por la propia institución, pero en ellos puede tener un origen de carácter moral: los niños son su única oportunidad de sobrevivir, de ahí a abusar de ellos físicamente (ya que a otros niveles es obvio, y si usted tiene dudas acérquese un día de estos por un catequesis donde se prepara a los niño-sujeto para la "primera comunión") hay menos distancia de que se puede pensar: ellos han construido uno de los más persistentes y peligrosos discursos sobre los niños, el de la madre abnegada, santa hasta muerta y que mantiene a un niño entre sus brazos que sabe que es un Dios.
Qué más se puede pedir: una lista púbica (al estilo de las norteamericanas basadas en Ley Megan) no es la solución y mucho menos tres fotos, porque no reconoce la profundidad de los discursos sociales que construyen al niño-sujeto como objetos social (y privado) de los adultos.

martes, 19 de febrero de 2008

Matemática difusa como excusa

Esta chica de la imágen es Michelle Malkin, una famosa blogger que se dedica a escribir una serie de artículos de lo más incisivos y de acuerdo con la retórica de la nueva derecha. El caso es que se ha convertido en una defensora de las causas que le preocupan a un sector de la población que no se siente demasiado a gusto con el mundo globalizado, entre otras cosas porque sienten que eso es lo que les ha tirado sus Torres Gemelas o les obliga a dar cancha a los que puedan utilizar el pensamiento como método de vida. Bueno, a lo que vamos, Michelle ha escrito un artículo sobre, más bien, contra, la matemática difusa que resulta de lo más gracioso. En realidad no pasa nada, es una preocupación de unos norteamericanos de clase media, que se cree acomodada (por que se comparan con lo peor del tercer mundo), y que tras destruir, entre otros, su sistema educativo básico se han dado cuenta que sus jóvenes no aprenden a sumar en la escuela y claro le echan la culpa a la llamada matemática difusa.
Pero lo que me preocupa de verdad es que un medio como Libertad Digital haya traducido el trabajito de opinión de Michelle Malkin sobre la matemática difusa y lo plantee como la política del gobierno de Zapatero. La verdad es que a mi no me sorprende, pues se de la enfermedad mental que acompaña al medio en cuestión, lo que me llama la atención es que se crean que los peques, sus niño-sujeto, son tan tontos como para no saber que es o no lo importante. En efecto, aquí de lo que se trata es creer que la izquierda quiere intoxicar a cualquier precio a los niños y no porque crean que estos son hojas en blanco sino porque creen que alguien los quiere raptar y convertir en unos zombis del Estado. De lo que no se dan cuenta es que al Estado no le preocupan los niños, sino establecer con ellos un discurso que es disciplinador a un nivel social. Pero claro una vez más la (extrema) derecha demuestra su enorme capacidad de intoxicar al conjunto social con sus ideas, que nacen directamente de su particular armario anti-intelectual, donde habitan una serie de fantasmas de lo más repugnante y que cada vez que sacan a pasear nos meten en un mundo violento y extremo. Al final los peques son una excusa de su particular cruzada contra el cambio y, sobre todo, de los intelectuales.

martes, 12 de febrero de 2008

Niños soldados

Los niños soldados sufren sobre su piel un doble discurso, por un lado el de su propias vidas, que como resulta obvio es demoledora, no sólo porque sean niños, sino por lo qué hacen, el por qué y el cómo. Por otro lado, tienen que sufrir el discurso que se hace desde occidente, donde los niños soldados son todo lo que suponemos que es todo lo contrario de los sujeto-niño, una suerte de no-niño: trabajan en algo que es propio de un adulto, utilizan armamento, no tienen una familia de referencia, no están escolarizados, viven en un alto grado de violencia y están expuestos a morir en una edad que no parece corresponderles. Pero quitando el chiste fácil de que podría ser la descripción de un adolescente occidental pegado a su vídeo consola lo que planteamos es que el discurso es demasiado facilón como elemento pedagógico y ejemplificar, en última instancia es un tema que tiene que ver con lo que creemos que es la infancia y no tanto que haya una infancia que viva en tal o cual condición. Pero por otro lado si tenemos que entrar en los discursos comparactivos tendríamos que entender que los niños en determinadas condiciones pueden ser miles de cosas, muchas de ellas seguramente despreciables, pero también otras muchas que nos creemos que son exclusivas del mundo adulto.

Por último si alguien siente curiosidad por el tema y necesita saber más sobre los niños soldados, recomiendo, entre lo mucho que hay en la red, La coalición para acabar con la utilización de niños y niñas soldados y por último evitar el tema en youtube y ser cuidadoso y crítico con las constantes noticias que dan los medios casi a diario.

lunes, 11 de febrero de 2008

Con buena letra

¿Por  qué el sistema estatal-educativo se empeña en que los peques hagan buena letra? Entendiendo que la "buena letra" es hacer una caligrafía homogénea y cursi que no tiene ninguna referencialidad con la letra que un adulto puede realizar. Sin duda que habría que dejar a los peques que hicieran la letra que quisieran, pero sin embargo les obligamos a que repitan una y otra vez una caligrafía que les presupone, de antemano, en el papel de niños y, consiguientemente, en un mundo (falso) de constantes repeticiones, cursilerías y lineas rectas. En última instancia una pedagogía disciplinar y humillante, con la promesa de un mundo más bonito y uniforme, claro que a costa de los peques y a mayor gloria de los adultos.

domingo, 10 de febrero de 2008

El niño mediador

Hay un tipo de cine Hollywood que plantea el amor como punto central de las relaciones humanas, este subgénero tiene a su vez otro subgénero en que es un niño el que media en las relaciones entre los adultos, proponiendo la balanza en función de ciertos intereses; se trata de un niño que tiene un padre viudo y un tanto perdido y la posible madrastra es joven, secundaria y muy romántica. El resto es lo de menos, el final el sabido y por lo que a mi respecta es lo de menos. Este tipo de películas que aquí lo pondremos en la categoría sonrisas y lagrimas tiene un discurso concreto sobre el niño, sacándolo de su lugar como chico y poniéndolo como mediador de otros discursos que mantienen los adultos sobre si mismos. Pero es que ademas este modelo mantiene la idea general no sólo de que los adultos no pueden vivir, hacerse cargo de su hijo y comportarse-sentir correctamente si no es en el estrecho margen de la pareja-amor, sino que evidentemente este es el lugar concreto en que tienen que vivir los niños. Consecuentemente, la proposición es tan evidente que de esto se da cuenta "hasta un niño". El niño no es sólo el mediador de las relaciones adultas, en la misma medida que más de un matrimonio cree que tener un niño es sacarlo de su rutina, o que los niños son la verdadera expresión de la familia, sino que además se le propone como un generador de lo evidente, y que como tal será una máquina de amor permanente hacia todo lo que les rodea, desvelando los convencionalismos sociales, bajo el discurso paralelo de que están más cercanos a la naturaleza, que impiden que los adultos se den cuanta de sus verdaderos sentimientos. Obviamente un lugar que pone al peque en una situación de verdadera inferioridad al negar la posibilidad de una realidad propia y ajena a los adultos.

miércoles, 6 de febrero de 2008

Frases de niños o chistes de adultos

En el programa que hace Pablo Motos, El Hormiguero, el ingenio y la creatividad parecen ser su razón de ser, es evidente que trata ciertos tópicos con lo que se sirve para hacer, las más de las veces, unos chistes fáciles que sin embargo, dado el bochorno de la TV en abierto por la noche, parece que es lo único que se deja ver. El caso es que tiene una sección donde se las arregla para dictar una serie de "frases de niños", y que también se pueden seguir en la página web y a la sazón en un libro del que han vendido lo más grande. La mayoría de las frases son chistes un tanto surrealistas o, en su defecto, de un enorme carácter hiperrealista que hacen gracia tanto por que están descontextualizados cuanto más porque el discurso del sujeto-niño les precede y, consecuentemente, nos parecen graciosos porque aseguramos que el niño habla sin saberlo todo y porque los adultos si lo saben todo, de la paradoja nace la carcajada.

Pero es obvio que el mecanismo del chiste es una suerte de elementos culturales muy complejos, que se simplifican en la idea de que la realidad es reducible a un única simplificación prototípica, y de esta disyuntiva nace la llamada gracia. Cuanto más paradoja, más disyuntiva y más distancia entre la complejidad y su consiguiente simplificación más gracia producirá el chiste. El chiste se aprovecha, además, de algunos otros tropos, la sorpresa, la reiteración, el retruécano, la elipsis y el eufemismo, aunque no desdeña el resto de los recursos literarios clásicos. Por último, el chiste es siempre una construcción cultural muy precisa que se aprovecha de esta tanto como para ser, a su vez, un conformador y concentrados cultural. Pero en el discurso del sujeto-niño todo esto no se adelanta a lo que ellos dicen, sino que se les convierte en ello a posteriori, al aplicarles ese discurso cultural que les propone en un lugar muy preciso y que está en relación con una constante subordinación graciosa y, a veces, simpática de los peques a los discursos de los mayores-adultos.

Claro que todo este discurso que se ejerce sobre el sujeto-niño es siempre reversible: y todas estas frases que en un contexto reestructurado nos parecen tan graciosas, chistosas y nos hacen sospechar que son ingeniosos y únicos (en última instancia no es por casualidad que sean "nuestros hijos") en otro pueden ser la prueba de que están inválidos culturalmente y, consecuentemente, que necesitan ser vigilados de cerca y sobre-estimularlos con procesos socializadores y educativo-reformadores. Dicho de otra manera estas frases que nos propone Pablo Montes pueden ser muy graciosas puestas en su libro, programa de TV o en su web pero en un contexto cotidiano, el de esas familia de clase media tecnificada que ve el programa con sus hijos a la espera del "vete a la dormir", pueden ser el detonante de todo aquello que les hacen que tengan que callarse porque no saben lo que dicen, porque van de graciosos o, simplemente,  porque lo que dicen es una estupidez.

lunes, 4 de febrero de 2008

Algunas confusiones al respecto

Cuando pedimos el voto para los peques no debemos confundirlo con aquellas otras propuestas parecidas y que se basan en ampliar el poder de otras instituciones (léase la familia, por ejemplo) basándose en la constante tutela y negación de los derechos individuales de los niños. Para muestra la propuesta por el voto infantil de las Asociaciones Cristianas de Trabajadores de Italia (www.acli.it). Que proponen que los niños puedan ejercer su derecho democrático, representados por sus progenitores o tutores. ACLI reconoce así que los niños son una fuerza a quien hay que incluir en la toma de decisiones importantes. En una linea parecida nos encontramos con un trabajo de Mikel Agirregabiria (que también participa aquí en blogspot: blog.agirregabiria.net) titulado "voto infantil", donde propone de una manera ciertamente un tanto blanda, aunque hay que reconocer que esta bien razonado, dar el voto infantil vía tutela familiar.

Sin duda que esto no es ni el punto de partida, ni el método, ni la conclusión de lo que aquí proponemos, aunque me alegra que sean muchos los que están pensando en el tema.

domingo, 3 de febrero de 2008

Lugares comunes sobre niños

"¿Cómo es que, siendo tan inteligentes los niños, son tan estúpidos la mayor parte de los hombres? Debe ser fruto de la educación”. Alejandro Dumas

"En mi casa he reunido juguetes pequeños y grandes, sin los cuales no podría vivir. El niño que no juega no es niño, pero el hombre que no juega perdió para siempre al niño que vivía en él y que le hará mucha falta”. Pablo Neruda

“Jamás ha habido un niño tan adorable que la madre no quiera poner a dormir”. Ralph Waldo Emerson

“Los niños comienzan por amar a los padres. Cuando ya han crecido, los juzgan, y, algunas veces, hasta los perdonan”. Oscar Wilde

“Los niños son el recurso más importante del mundo y la mejor esperanza para el futuro”. John Fitzgerald Kennedy

“La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir; nada hay más insensato que pretender sustituirlas por las nuestras”. Jean Jacques Rousseau

“El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices”. Oscar Wilde

“Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad”. Karl A. Menninger

“El mejor olor, el del pan; el mejor sabor, el de la sal; el mejor amor, el de los niños”. Graham Greene

“He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño”. Joseph Heller

“Protegedme de la sabiduría que no llora, de la filosofía que no ríe y de la grandeza que no se inclina ante los niños”. Khalil Gibran

“Si la ayuda y la salvación han de llegar sólo puede ser a través de los niños. Porque los niños son los creadores de la humanidad”. Maria Montessori

“Los niños y los locos dicen las verdades”. Refrán

“Los niños son la esperanza del mundo”. José Martí

“Los niños han de tener mucha tolerancia con los adultos”. Antoine de Saint-Exupery

“Los niños necesitan más de modelos que de críticos”. Joseph Joubert

“Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres”. Pitágoras de Samos

“La palabra progreso no tiene ningún sentido mientras haya niños infelices”. Albert Einstein

“Los hombres son siempre niños, aun cuando a veces asombren por su crueldad. Siempre necesitan educación, tutela y amor”. Máximo Gorki